El sindicato ErNE, mayoritario en la Ertzaintza, ha presentado una denuncia ante la inspección de Trabajo por las«pésimas» condiciones de salubridad que existen en diversas comisarías de Gipuzkoa a raíz de la huelga de las trabajadoras de la limpieza de las sedes judiciales y ertzain-etxeas del territorio, que se alarga ya más de seis meses sin que se vislumbre una solución a corto plazo. La central, de hecho, pide que se cierren las comisarías hasta que se garanticen unas «básicas» condiciones de higiene. «La salud de los ertzainas es más importante que tenerlas abiertas», subrayan desde ErNE.
La huelga fue convocada hace más de seis meses por las trabajadoras de la empresa Garbialdi para reclamar el fin de la «brecha salarial» que, según denuncian, existe respecto a otros sectores de limpieza más «masculinizados». Desde entonces, se han producido diversas movilizaciones. Pero las posturas de la empresa y los sindicatos parecen seguir muy alejadas.
En este contexto, los ertzainas y trabajadores de Justicia llevan tiempo denunciando las malas condiciones en las que se ven obligados a trabajar. En algunas comisarías de Gipuzkoa, por ejemplo, se han llegado a ver ratas y decenas de cubos de basura acumulados, incluso en las zonas reservadas para que los funcionarios puedan comer. El sindicato ErNE considera que esta situación ha sobrepasado ya «todos los límites» y exige soluciones «inmediatas». De hecho, reclama que se cierren comisarías hasta que los agentes puedan trabajar «en condiciones». «El servicio policial es básico para la sociedad. No tenemos reconocido el derecho a a la huelga. Pero no podemos permitir que se ponga en riesgo la salud de los ertzainas por un conflicto entre terceros», insisten desde la central.