La medida también ha causado un importante malestar entre los sindicatos de la Ertzaintza. Fuentes de Erne, la central mayoritaria, censuran que se tenga que recurrir a la comisaría de Bilbao cuando la Ertzaintza, en la capital vizcaína, tiene 150 agentes menos que la Policía local. Recuerdan, en este sentido, los graves problemas que sufre también el área de investigación de guardia del cuerpo autonómico, donde se han producido salidas de funcionarios cualificados por la «sobrecarga de trabajo». A su juicio, este caso es un ejemplo del «fracaso» del modelo de investigación. Y advierten de que poner a agentes sin formación a realizar este tipo de tareas es un problema de seguridad pública y puede derivar en que esos propios policías acaben procesados por no saber realizar bien este trabajo.
Los graves problemas de personal que arrastra la Policía Municipal de Bilbao en el área de investigación, en concreto entre los agentes que recogen denuncias o tramitan detenciones, han provocado este fin de semana un hecho insólito. Por primera vez, la guardia urbana ha solicitado colaboración a la Ertzaintza para que estos días, en el caso de que no puedan asumir de forma correcta toda la carga de trabajo en la comisaría de Miribilla, la Policía autonómica se haga cargo de sus detenidos y de realizar las diligencias correspondientes en el centro policial de Deusto.
En estas circunstancias, el Ayuntamiento ya había decidido reforzar la unidad con policías de otras áreas. Pero, además, a los problemas de fondo se han sumado este fin de semana las bajas laborales de tres de los agentes que debían trabajar en la unidad.
Fuentes oficiales del Ayuntamiento subrayan que la petición de colaboración a la Ertzaintza es sólo para el caso de que no puedan gestionar de forma adecuada todas las detenciones. A este respecto, inciden en que no habían tenido que recurrir a la Policía vasca y que, de hecho, tenían a dos detenidos en los calabozos de Miribilla.